Desde la publicación del RD 830/2010, el sector de la Sanidad Ambiental ha experimentado una profesionalización que ha convertido a nuestros especialistas en control de plagas y desinfección en verdaderos expertos.
En los últimos años, con la incorporación de nuevos avances tecnológicos y con la necesidad de hacer más sostenibles las actividades que desarrollamos, han sido muchas las iniciativas que se han implementado en el sector.
El sector alimentario, tan sensible a las plagas, por razones obvias, también ha desarrollado esquemas que trabajan en el control de la inocuidad de los alimentos. En particular, IFS FOOD ha publicado una guía específica que desarrolla las buenas prácticas en el denominado IPM (Manejo Integral de Plagas).
Esta metodología de trabajo pretende el control de plagas desde el punto de vista de la integración de diferentes formas de trabajar, minimizando el uso de productos biocidas.
Reduzcamos el impacto ambiental mediante métodos alternativos al uso de biocidas
El objetivo en el control de plagas es la identificación de riesgos que pueden ocasionar infestaciones por plagas. Para ello, es necesario implementar un principio básico de trabajo que consiste en:
- Realizar un Diagnóstico de Situación.
- Desarrollar un Plan de Trabajo específico.
- Evaluación continuada.
Con la implantación de estos tres pilares y una vigilancia del centro de trabajo y formación, tanto del personal interno como de los especialistas en control de plagas, se consigue evitar riesgos de proliferación de plagas.
La nueva versión de IFS PEST CONTROL GUIDELINE incorpora dos nuevos conceptos en el desarrollo del servicio de control de plagas: Sostenibilidad y digitalización. Y, la integración de estos conceptos en la sistemática de trabajo en el control de plagas se puede realizar desde la siguiente operativa:
Sostenibilidad: Minimización en el uso de productos biocidas y adecuación de nuevas metodologías de trabajo mediante el control preventivo y monitorización.
Digitalización: Papel cero. Nuestros clientes disponen a tiempo real de toda la información relacionada con los riesgos de sus instalaciones y la implantación de los métodos de control asociados.
OBJETIVO UNO: Dejar de utilizar biocidas (Reducción del 100% de su uso).
OBJETIVO DOS: Dispositivos 24/7 de vigilancia (“Internet de las cosas”).
